viernes, 29 de julio de 2022

Audiolibro: De la vida y la muerte. Capítulo 2. La impermanencia - Reseña vivencial.


El cambio de Todo es permanente. El poder observarlo, ha de transformar nuestra relación consigo mismo, con los seres cercanos y lejanos, con la naturaleza y con el universo.

Cuidar nuestro planeta es valorar la vida y si ésta continúa indefinidamente en el universo como lo plantea la filosofía tibetana, nuestra actitud ha de ser ecológica y de acciones diarias con urgencia: Evitar a como dé lugar las quemas en los campos, la pólvora que aturde nuestra fauna; cuidar el agua y la madre tierra. Si nos sentimos con derecho a respirar, hemos de despertar conciencia, para que otras generaciones también lo puedan hacer.

 

La pregunta de cómo valorar la vida llega reiteradamente a la conciencia. Y he aquí una primera respuesta: El aceptar la muerte, comprender que todo lo que vive, morirá; lo construido, se derrumbará; lo que hoy es, mañana no estará. Comprender la impermanencia de las cosas y de los seres, e integrar tal comprensión a nuestra vida, permite mirarse uno con humildad y mirar hacia los otros seres con compasión.

¿Y cómo mirarse uno con compasión? Ante todo, escucharse: qué me incomoda, qué me inquieta y para ello he de practicar la meditación.

Una de ellas es respiración consciente y al exhalar lentamente dejar ir también los pensares del momento, es un intento de práctica que se retomará luego. Otra práctica sabia y sencilla que propone El libro tibetano de la vida y la muerte, es meditar en la muerte durante sencillos momentos de gozo, de tristeza o quizá de serenidad. Ello permitirá comprender ese cambio permanente en la danza del vivir y morir.

El aceptar la muerte y reflexionar con frecuencia sobre ella y acerca del cambio permanente de todo lo existente, produce el desapego y como una sensación de liberación de los viejos hábitos del pensar y el actuar repetitivos que nos hacía danzar en un círculo continuo Sin poder saltar hacia fuera de esos pensares y preocupaciones. El desapego se va experimentando paulatinamente, como efecto del reflexionar frecuente acerca del cambio permanente. Dice el autor que no es fácil el desarraigo de las viejas costumbres. Es la reflexión, un ejercicio que ha de practicarse al despertar, en la mañana, al atardecer, en la noche, y así interiorizarlo, para vivenciar paulatina y gozosamente el desapego a tantas cosas que antes nos ataban a la repetición. Muchas veces se siente como un hastío de la vida personal, como la necesidad de experimentar algo nuevo que nos libere de la monotonía; y he aquí un modo vivencial de hacerlo.

  

No hay comentarios.:

Publicar un comentario

Audiolibro: El libro tibetano de la vida y la muerte. Sofyal Rimpoché- capítulo 8-esta vida el bardonatural-reseña vivencial.

Capítulo 8. Esta vida, el bardo natural Ahora llegamos a la parte más valiosa del libro DE LA VIDA Y LA MUERTE, ¿¿De dónde viene nuestra m...