viernes, 19 de mayo de 2023

Audiolibro-El libro tibetano de la vida y la muerte-Sogyal Rimpoché-Capítulo 13-Ayuda espiritual para los moribundos-Reseña vivencial

    Un derecho natural que todos tenemos es a morir en paz; y de ello poco se habla en esta cultura; ¿será que se teme morir? En situación última de vida el personal médico y el sacerdote asisten al moribundo; pero,  ¿Quién está atento a escucharlo, tomarlo de la mano y alentarlo a expresar todo lo que vive y siente? Escucharle con amor y compasión reconociendo en él su verdad, creencias y sabiduría para afrontar esos momentos. No imponerle lecturas ni oraciones, si ora, hacerlo mentalmente y éste recibirá suben edición.  Para acompañarlo, se ha de invocar la divinidad en quien yo creo para recibir su luz, aumentar en mí la compasión y poder proyectarla al moribundo. Este la recibirá y sentirá alivio espiritual y de sus dolores corporales. Ayudarlo a reconocer todo lo bueno que en su vida ha realizado y a perdonarse por aquello que le produce culpabilidad. Comprender que el errar es humano y la divinidad perdona siempre. Si tengo paz y serenidad puedo proyectarla y crear un ambiente sagrado para esos momentos de esperanza e iluminación que ayuden al moribundo. Sólo pienso en ¿cuán necesario es practicar la meditación, esto es, centrarse en la acción presente, sentir y ver la luz – presencia iluminada de la naturaleza de la mente para poder acompañarlo.

 

Con sensibilidad e inteligencia acompañar a la persona y escoger una práctica apropiada para meditar con ella: una invocación, un mantra o una oración que los conecte con la divinidad y que la persona sienta que lo purifica de su karma. el audiolibro sugiere la práctica de  phowa para hacerla una y otra vez. Indica tres maneras de realizarla : Sentarse o acostado cómodamente, llevar la mente a casa, soltarse   y relajarse del todo.  invocar la presencia viva de la divinidad con que sienta mejor conexión: el buda de su devoción, santísima Trinidad, Virgen María o Jesucristo, sentir su presencia viva su fuerza y su luz. Si no se siente unido a ninguna figura espiritual imagínese sencillamente una luz pura y dorada, ante usted. Llénese el corazón y la mente con su presencia y confiar que están ahí. Orar y pedirle lo sane y purifique del karma de su vida pasada. Totalmente purificado por esa luz, siéntase usted que su cuerpo es luz que se eleva hacia el cielo y permanezca ahí lo más que pueda.    ¡Qué gran significado el de la luz! ¿Será que algún día lograremos comprenderlo y a través del camino espiritual transformarnos?

 

Práctica dos: adopte la posición de la práctica anterior invoque la presencia del ser divino que para usted encarne la verdad; imagine su conciencia como una esfera de luz que sale de su corazón como una estrella fugaz hacia el corazón de la presencia que ha invocado y se fusiona con ella.  Imaginar que, por su bendición, mi mente se transforma en la mente de esa presencia iluminada, que equivale a entregar el alma en la naturaleza de Dios.

Práctica tres: Limitarse a fusionar mi mente con la mente de sabiduría de la presencia pura; pensar que mi mente y la mente del buda son una sola.

 

Practicar phowa u otra técnica de meditación una y otra vez para interiorizarla. Es la única manera de acudir a ella ante un peligro inminente de morir. ¿y cual sería la ventaja? Asumir ese trance con aceptación, y sentirse presencia viva de divinidad que lo purifica; sentirse luz e iluminación cual cielo radiante. ¿Cómo acompañar a la persona en los días finales de su vida o al momento de morir con la práctica de phowa? Visualice la presencia vivade la divinidad sobre la cabeza del moribundo; Imagine la luz que se derrama sobre la persona y purifica todo su ser; luego la persona se disuelve en luz y se funde con la presencia espiritual. Sugiere este libro hacer esta meditación durante la enfermedad, al momento de morir y antes de que sea movido el cuerpo de su lecho. Esta práctica puede ser una fuente de inspiración y serenidad, aunque el moribundo no participe en ella y si la conoce y participa mucho mejor. Sentado cerca del enfermo y Con una vela encendida y la imagen de la divinidad, hacer esta práctica para el moribundo” ¡Cómo cambiaría el ambiente hospitalario, dice el autor, si el personal médico practicara phowa ante el moribundo! 

miércoles, 17 de mayo de 2023

Audiolibro-el libro tibetano de la vida y la muerte-Sogyal Rimpoché-capítulo doce-La joya que concede los deseos --reseña vivencial

Plantea el capítulo doce del texto que nos ocupa, el derecho democrático a estar acompañado espiritualmente durante la muerte. Si en momentos difíciles de la existencia, es grato y necesario que alguien nos escuche ¿cómo no en ese trance final?  Es cierto que culturalmente se tiene poca conciencia de ello, en occidente. A buena hora nos enteramos de que es necesario prepararnos para hacerlo; despertar en mi la compasión desde el amor, es lo primero. Reconocer la sabiduría inmensa que poseo desde el amor universal, desde mi deseo de escucharme, de no juzgarme, de perdonarme aquellas culpas perturbadoras y buscar serenidad y tranquilidad personal.

Cada despertar mañanero invita a la meditación en las acciones a realizar. Por ejemplo, al disponerme para escuchar un capítulo del audiolibro, centrar la atención consciente en escuchar; puedo ayudarme con respiración profunda, inhalando y, sostengo el aire en el abdomen y exhalar lentamente por la nariz. Hacerlo cada que sea necesario y separar la mente de distracciones pasadas y futuras. Esto podría ser despertar la compasión por sí mismo, para comprenderse en las acciones cotidianas.

 

 

Otras acciones para despertar la compasión en uno mismo: si en casa o en la vecindad hay alguien que mucho fastidia con sus actuaciones, servirle con amor en lo que puedo, escucharlo sin afán de objeción y ese acto de amor sanará poco a poco mi karma e influirá positivamente en el otro.

Otra práctica interesante es hacerme consciente de la situación personal presente: desesperanza, dolor, enfermedad, y pensar en cuantos seres del mundo sienten lo mismo. Asumir esa dificultad de todos como si fuera mía, pensar en ella y absorberla en inhalación consciente. Luego exhalar toda esa queja lentamente, sintiendo que mi dolor sirve a la humanidad para sanarse del suyo. 

El libro tibetano de la viday la muerte-Sogyal Rimpoché-capítulo once-nuestra actitud frente a la muerte-reseña vivencial

NUESTRA ACTITUD FRENTE A LA MUERTE (Capítulo 11)

Creo que lo primero y esencial, es aceptar la muerte como una pérdida de este cuerpo que nos acompañó en la corta existencia. Además, estar convencido de la continuidad de mi espíritu, en forma de energía permanente y, la cual seguirá manifestándose en otros seres. Tal concepción ayudará a sentir confianza, para acompañar de corazón al moribundo. Un silencio respetuoso, compasivo y atento a lo que la persona quiera y pueda expresar, así sean sentires de cólera, temor o de culpabilidad. Estar convencido de que es más importante escuchar que hablarle, a no ser que la persona lo pida.

Este capítulo once, es un llamado aponerse en lugar del moribundo. ¿Qué sentiría yo? Necesidad de amor, aceptación incondicional, actitudes que ayuden a desprenderse de tantas cosas que nos han mantenido aferrados a la vida.  Dichas actitudes pudieran expresarse con palabras, contacto físico y ternura solidaria. En caso frecuente de no saber qué hacer, decírselo, para que en su sabiduría nos oriente y a la vez sienta verdadera comprensión. Esto es, reconocer en el moribundo su capacidad de vivenciar su momento final, su iluminación del Buda que lleva dentro y su actitud de afrontar ese momento, así como fue su vida. Parece asombroso que sea tan importante para una muerte tranquila, una actitud informada y consciente de los familiares y el personal médico que rodean al moribundo. Permitirle en lo posible mantener conciencia de su proceso final y ayudarle a aceptar con naturalidad los cambios que vaya sintiendo y sean manifestados por la persona; y qué importante, no ha de tratarse como a un enfermo, si no como persona que que comprende su proceso y no ha de estar sólo en ese trance tan natural e importante de su corta vida.    

     

martes, 2 de mayo de 2023

El libro tibetano de la vida y la muerte - Sogial Rimpoché - La esencia íntima - Reseña vivencial

                    Siguiendo el hilo del camino de preparación hacia tener paz y serenidad en el momento de la muerte, nos invita el capítulo diez a la práctica del dzogchen, para alcanzar la iluminación perfecta. ¿En qué consiste el dzogchen? Es un estado de capacidad para sentir y vivenciar de modo puro y espléndido, la naturaleza de la mente. Verla cual cielo limpio, inmenso y espacioso, libre de Samsara y el nirvana, esto es libre de pensares cotidianos que oscurezcan la visión del discípulo recibida desde su maestro, a través del centro energético de la mente y de la práctica del dzogchen, Ese momento iluminado, en el que brota un pensamiento-la verdad y sabiduría de la mente y no se detienen, sino que se auto liberan dejando la mente iluminada sin nada que la ocupe ni la distraiga, es el estado puro del dzogchen. Lograr ampliar ese estado puro de la mente iluminada y permitir que se auto liberen sucesivamente las otras verdades de  la sabiduría de la mente que vayan emergiendo, es avanzar en la práctica del dzogchen. Es como estar en un vacío iluminado de plenitud completa en el que nada falta, nada perturba la mente; todo es felicidad plena, es como nos han pintado el cielo. ¿ Será que hacia allá vamos? Sinceramente es un camino a seguir por practicantes fervientes del budismo.

María Gabriela Quintero López

Audiolibro: El libro tibetano de la vida y la muerte. Sofyal Rimpoché- capítulo 8-esta vida el bardonatural-reseña vivencial.

Capítulo 8. Esta vida, el bardo natural Ahora llegamos a la parte más valiosa del libro DE LA VIDA Y LA MUERTE, ¿¿De dónde viene nuestra m...